Nuestra imagen es una obra de arte colonial tallado en madera de naranjo, que data de los tiempos de nuestra organización nacional. La Sagrada imagen fue donada por la Señora Rosario Bringas de Núñez. El terreno que ocupa la Iglesia fue donado por el Señor Nilamon Bulacio, el donativo se hizo por nota al excelentísimo Obispo de Tucumán, Monseñor Agustín Barrera; quien acepto las donaciones y declaro: Patrón del pueblo de Acheral a San Antonio de Padua por decreto, el 18 de junio de 1932.
El Reverendo Padre Jaime Roig, párroco de Monteros, agradeció personalmente a la Señora Rosario Bringas de Núñez tan preciado regalo, luego nombro Comisión para construir la iglesia pero…apenas empezaba la obra quedo paralizada.
Después de muchos años, siendo Párroco de Monteros, el Reverendo Simón Pedro Lobo pidió a la Señora Teofila Villafañe de Luna que aceptara el cargo de presidenta para que se terminara la construcción del templo y San Antonio, como patrono del pueblo, tenga su casa. Recibiendo la señora Teofila su nombramiento del Excelentísimo Señor Obispo de Tucumán Monseñor Agustín Barrera con fecha 23 de junio de 1948, con todo amor a Dios y santo entusiasmo empezó la tarea nada fácil de terminar la obra de la iglesia que estaba olvidad, asesorada por el padre Lobo se formo una Comisión Directiva; empezando a trabajar sin reparar esfuerzos, sacrificios y desvelos. Así con la colaboración de todo el pueblo y devotos de San Antonio quedo terminada la construcción de la Iglesia. La Sagrada Reliquia fue entregada por descendientes de la Sra. Bringas de Núñez y trasladada procesionalmente de Monteros hasta su Templo en Acheral. Los cultos en Honor de San Antonio comenzaron con un Triduo en acción de gracias siendo la Imagen solemnemente bendecida y consagrada el 12 de Septiembre de 1954 por el Excelentísimo Señor Obispo Monseñor Juan Carlos Aramburu.
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